Hubiéramos preferido escuchar que el abandono de las armas y la lucha armada es definitivo, dado que los altos al fuego anteriores fueron rotos posteriormente. Pero también hay que tener en cuenta que lo prioritario es continuar el proceso de pacificación del conflicto vasco para acabar el sufrimiento y la violencia armada.
Por esta razón afirmamos que es una muy buena noticia un «alto el fuego», pues es un paso importante en el proceso de solución del conflicto vasco. Asimismo hacemos un llamamiento a los gobiernos de España y de Euskadi, a los partidos políticos y a la sociedad vasca y española a sumar esfuerzos para hacer posible el fin de la violencia en Euskadi.
Barcelona, 10 de enero de 2011